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Las empresas familiares son una de las más comunes en España, pero esto no quiere decir que sean sinónimo de éxito o fracaso. Hay empresas familiares que se convierten en gigantes de la industria, mientras otras terminan en el olvido a los pocos años de creadas. Se puede decir que una de las empresas familiares que es ejemplo de éxito es José Mestre, que tiene una marca insignia: Mestre. Mestre es una marca de tipo farmacéutica, dedicada a la producción de artículos ortopédicos y de puericultura. La marca es solo el principio de una gran red de producción compuesta por diferentes marcas, todas filiales de José Mestre. La marca ha logrado éxito gracias a su trabajo por hacer que sus clientes se sientan seguros con los productos que adquieren. La empresa sabe que un cliente contento es la mejor publicidad que puede haber, por lo que se preocupa por que cada producto de la marca pueda ser de ayuda para solventar problemas de los consumidores. Es importante destacar que en la actualidad, la empresa es gerenciada por la tercera generación de una familia que ha procurado trabajar fuertemente para alcanzar metas que en un principio parecían imposibles. A pesar que Mestre es parte de un mercado muy competitivo, donde hay muchas empresas importantes, en algunos casos, grandes monstruos que tiene reconocimiento nacional e internacional; esto no ha hecho que deje de tener una cuota de mercado importante, envidiable por muchas empresas emergentes o por aquellas que no han logrado superar una barrera comercial. La marca lleva más de medio siglo en el mercado y sus administradores no pretenden parar esta senda de crecimiento que se ha logrado, gracias a la preocupación de los administradores de la empresa por tener clientes contentos, que puedan dar fe de lo bueno que son los productos desarrollados y comercializados por Mestre.